Toma nota: gastos para las nuevas empresas
Las empresas tienen que gastar dinero incluso antes de abrir sus puertas. Los gastos de puesta en marcha pueden definirse como aquellos gastos en los que se incurre incluso antes de que el negocio esté en marcha. Mucha gente tiende a subestimar los gastos de puesta en marcha, lo que significa que, cuando su empresa comienza, lo hace de forma no planificada y fortuita. Aunque es posible que funcione incluso cuando se inicia de esta manera, es más difícil.
Echemos un vistazo a lo que pueden ser algunos de estos costes. Incluso puede que quieras echar un vistazo a una especie de guía para startups que te dice cómo hacer las cosas sin mucho dinero.
1. Marketing
Todas las empresas necesitan el marketing si quieren tener éxito. Sin el marketing, ¿cómo sabría su público objetivo que su empresa existe? Hay muchas maneras de comercializar, algunas tradicionales y otras más novedosas. Una de esas formas novedosas de comercializar es el marketing digital SEO. ¿Por qué invertir en este tipo de marketing? Una de las razones es porque le proporciona un alto ROI o retorno de la inversión. Otra razón es simplemente porque funciona. El SEO tampoco se va a ir a ninguna parte pronto. Está aquí para quedarse, así que es mejor que se acostumbre a él. Además, su competencia lo utiliza. ¿Vas a dejar que te adelanten porque ellos usan el SEO y tú no?
El marketing es uno de los aspectos que deberá tener en cuenta a la hora de estimar los costes de puesta en marcha.
2. Planificación
La creación de un plan de negocios es absolutamente esencial para iniciar un nuevo negocio. Este plan debe ser como un mapa detallado de lo que se pretende crear. Los planes de negocio le obligan a tener en cuenta todos los diversos costes de la puesta en marcha de su empresa. Subestimar estos gastos puede llevarle a aumentar falsamente su beneficio neto previsto y esta es una situación que no es buena para ningún propietario de una pequeña empresa.
Cada negocio es diferente y, como tal, puede requerir diferentes tipos de costes para empezar. Los negocios tradicionales tendrán costes diferentes a los de los negocios en línea, al igual que las librerías tendrán costes de puesta en marcha diferentes a los de las cafeterías.
Dicho esto, hay algunos costes típicos que pueden ser comunes a todo tipo de empresas. Incluyen, pero no se limitan a cosas como:
- Gastos de investigación.
- Tasas de permiso, licencia y seguro.
- Suministros y equipos.
- Promoción y publicidad.
- Los costes de los préstamos.
- Gastos de los empleados.
- Gastos tecnológicos.
Veamos un par de ellas.
3. Gastos de investigación
Antes de poner en marcha un negocio hay que investigar cuidadosamente el sector y la composición de los consumidores. A veces, los empresarios optan por contratar a una empresa de estudios de mercado para que les ayude en este proceso de evaluación. Los empresarios que deciden tomar este camino deben incluir en su plan de negocio los gastos y honorarios de la investigación de mercado.
4. Suministros y equipos
Cada tipo de negocio requerirá algún tipo de suministros y equipos básicos. Antes de añadir el coste de este equipo a su lista de gastos para la puesta en marcha, debe decidir si lo alquilará o lo comprará. Su estado financiero desempeñará necesariamente un papel importante en esta decisión. Es posible que tenga suficiente presupuesto para comprar el equipo, pero también es posible que se encuentre con gastos inesperados e inevitables, lo que puede hacer que el arrendamiento sea una opción más atractiva.
En cualquier caso, es fundamental recordar que, sea cual sea su situación de tesorería, el arrendamiento financiero puede no ser la mejor opción, dependiendo del tipo de equipo que necesite y de las condiciones del arrendamiento.
5. Gastos de los empleados
Las empresas que planean contratar empleados tienen que hacer planes específicos para los sueldos, los salarios y los beneficios, si es que se ofrecen beneficios. No compensar adecuadamente a sus empleados puede acabar con la moral baja, un eventual motín y una publicidad que no es buena. Todo esto puede ser malo para una empresa.
6. Gastos tecnológicos
Esto puede incluir el coste de tener un sitio web diseñado y alojado, el registro de un nombre de dominio, el software y los sistemas de información, y más. Esto incluye el software para las nóminas y la contabilidad. A veces, los propietarios de pequeñas empresas subcontratan estas cosas para poder mantener sus gastos al mínimo.